La alimentación incide en el dolor de cabeza

Los pacientes genéticamente susceptibles a las crisis de migraña deben realizar 4 comidas diarias, 2 colaciones y evitar ciertas sustancias que se encuentran en algunos alimentos o bebidas. 

Es clásica la escena luego de las fiestas, tanto de Navidad como de fin de año: nos levantamos no sólo cansados porque quizás dormimos poco, sino también con un inexplicable y agudo dolor de cabeza Quizás no hayamos tomado alcohol o escuchado música a todo volumen hasta la madrugada, como para encontrar la razón del dolor, pero lo que no sabemos es que algunos alimentos y bebidas, como las nueces junto con las confituras que tienen mucho chocolate, el condimento del vitel toné y la copita de champán que tomamos para brindar, desencadenen esa migraña. Es necesario aclarar que hay personas con predisposición hereditaria para padecer esta enfermedad, y por eso es importante que conozcan las sustancias que poseen ciertos elementos y bebidas que pueden disparar crisis intensas de dolor de cabeza, para evitar su consumo y tratar de no combinarlas. Es también fundamental explicar que una dieta "sana" no es lo mismo que una buena dieta para un paciente con migrañas frecuentes, ya que muchos alimentos que son adecuados para una dieta saludable pueden contener sustancias capaces de desencadenar dolores de cabeza.

Los malos hábitos alimenticios como el ayuno pueden también desatar una de estas crisis que durante el día dificultará las tareas, incluso pueden llevar a anularlas, deteriorando la calidad de vida. Dentro de la gran cantidad de desencadenantes, el ayuno es referido por el 40% de las personas y el 20% reconoce un factor alimentario como disparador.

SANA MENTE

• Mezclar una cucharada de miel con media cucharada de jugo de ajo y beber cuando aparezca el dolor.
• En un vaso de agua fría, agregar dos cucharaditas de raíz de valeriana. Dejar reposar la mezcla durante 12 horas, colar y tomar el líquido resultante.
• Beber diariamente una cucharada de aceite de oliva virgen, mezclado con el jugo de medio limón.
• Preparar una infusión con un puñado de melisa y beber un vaso diario.
• Licuar 300 gramos de repollo y 100 de apio en medio litro de agua. Colar y tomar a diario en ayunas.
• Colocar un puñado de manzanilla en medio litro de agua y llevar a hervor. Colar, agregar unas gotitas de limón y beber.
• Tomas dos tazas de una infusión de jengibre combinada con una cucharada de corteza de sauce y media cucharadita de anís.
• Realizar una infusión de parte fresca de ortiga y beber tres veces por día.
• Aplicar sobre la frente o la zona de la cabeza afectada, un pañuelo blanco empapado en vinagre de manzana.
• Cortar en rodajas un pepino y masajear de manera circular las sienes durante cinco minutos para inducir pequeños cambios en el riego sanguíneo de la cabeza.